despedir hasta finales de agosto o principios de septiembre.
Tenía pensado despedirme de vosotr@s con un interesantísimo y larguísimo
discurso pero... lo he perdido, sí, ahora mismo no lo encuentro por ninguna parte.
(Qué mentiroso soy).
(Lo cierto es que no lo he perdido).
(Lo cierto es que se lo ha comido una cabra).
(Sí).
(Dominguita).
(La cabra se llama Dominguita).
(Eso es lo cierto: mi discurso de despedida se lo ha comido la cabra Dominguita).
(Sí sí sí).
(Y llegados a este punto quizá alguien se pregunte...)
(¿quién es la cabra Dominguita?)
(Y yo estaría encantado de responder).
(Pero no puedo).
(No).
(No no no).
(¿Y por qué no puedo?)
(Pues porque tenía preparado un discurso para presentar a la cabra Dominguita...)
(...pero alguien se lo ha comido).
(Sí).
(Y ya sabéis quién se lo ha comido).
(Sí sí sí).
(La cabra Dominguita).
Así que hoy no hay discursos...
...ni ná de ná.
¡Hasta luego!
:-)